Sergio Leone: El Bueno, el Feo y el Malo

TRES BRIBONES, UN TESORO Y UNA GUERRA

 "Sabes, el mundo se divide en dos categorías. Los que tienen el revólver cargado y los que cavan. Tú cavas". "El Bueno" (Clint Eastwood) en El bueno, el feo y el malo (Sergio Leone, 1966).

Mientras La muerte tenía un precio pulverizaba records en el Supercinema de Roma, los directivos de la sede londinense de la United Artists fueron invitados a un pase junto con las tres mil personas que abarrotaban el recinto. El objetivo del productor Alberto Grimaldi, el guionista Luciano Vincenzoni y de Sergio Leone era vender los derechos de la distribución del film en el extranjero. Finalmente, llegaron a un acuerdo por el que obtuvieron un millón de dólares. En la misma reunión, al ser cuestionado acerca del próximo proyecto del trío, Vincenzoni improvisó: "Es un film acerca de tres bribones en busca de un tesoro en la época de la guerra civil americana". Los ejecutivos de la United Artists preguntaron qué presupuesto necesitaban para el film. Dándose la vuelta, Vincenzoni le preguntó a Grimaldi en italiano y éste contestó "Ochocientos mil dólares". Vincenzoni, en inglés, dijo a los ejecutivos de la United Artists  "un millón de dólares", cifra que fue aceptada. El bueno, el feo y el malo (Il buono, il brutto, il cattivo) terminó costando un millón trescientos mil dólares, aunque su distribución internacional ya casi garantizaba dicha cantidad.

Tras el fallido intento de colaboración con el dúo de guionistas conocido como Age-Scarpelli, la historia, que fue escrita por Vincenzoni y Leone (de nuevo con la participación no acreditada de Sergio Donati), estaba protagonizada por tres hombres.

ATENCIÓN: CONTIENE DESCRIPCIONES DEL ARGUMENTO Y SECUENCIAS DEL FILM

Tuco Benedicto Pacífico Juan María Ramírez, alias "El Feo", (Eli Wallach), mantiene una curiosa relación laboral con Rubio, alias "El Bueno" (Clint Eastwood).

La gran habilidad de éste con el rifle permite que Tuco se deje entregar constantemente a los sheriffs que le buscan a lo largo de todo el país por sus múltiples crímenes y delitos. Cuando va a ser colgado por ellos, Rubio se sitúa entre el público, y antes de que Tuco muera ahorcado, dispara a la soga y escapan juntos en su caballo. Una vez ambos se encuentran a salvo, se reparten la recompensa que Rubio cobra por entregar a Tuco.

El tercer personaje es Sentencia (llamado "Angel Eyes" en la versión inglesa e interpretado por Lee Van Cleef), un asesino a sueldo tan cumplidor como profesional. Por quinientos dólares, es contratado por Mr. Baker para obtener información de un granjero acerca de cómo se hace llamar ahora un tal Jackson y después matarlo. Cuando llega a la casa de éste, Sentencia le comenta el asunto. El granjero, asustado, le dice que Jackson ahora se hace llamar Bill Carson, dobla la cantidad y ofrece mil para que no lo mate. Sin embargo, Sentencia le informa de que una vez que recibe un encargo siempre lo cumple, por lo que lo asesina. Posteriormente, informa a Baker de la muerte del granjero y del nuevo nombre de Jackson. "¿Sabes qué? Me ha ofrecido mil por matarte a tí". Ambos hombres sonríen y Sentencia lo mata. La imagen se congela y aparece el rótulo "El Malo".

Más adelante, Rubio decide poner fin a su sociedad con Tuco cuando éste le pide más del cincuenta por ciento de los beneficios. Lo abandona atado en el desierto y ante las protestas de éste le espeta: "Qué ingratitud, con la de veces que te he salvado la vida". Otro rótulo: "El Bueno". Sin embargo, como es lógico, Tuco no muere. Consigue llegar a la ciudad y hacerse con un arma. Trata de vengarse de Rubio mandando a tres pistoleros, y aunque éste los repele, le da caza por la espalda. Las tornas se invierten y es ahora Tuco quien tiene en sus manos a Rubio. Sin darle agua, le lleva al desierto y hace que se adentren en él para dejarle morir de sed.

Cuando Rubio está completamente deshidratado y a punto de morir, un carromato aparece en el horizonte. Tuco se aproxima a él. Parece estar lleno de soldados sudistas muertos. Sin embargo, uno está vivo y, por un trago de agua, le ofrece a Tuco 200 mil dólares en oro que dice tener enterrados en una tumba del cementerio de Sad Hill. Tuco va hacia su propio carromato a por el agua y cuando vuelve ve que el soldado ha muerto sin haberle dicho el nombre de la tumba... aunque Rubio está junto a él y a él sí se lo ha dicho. Así, ambos deberán colaborar el uno con el otro para conseguir el dinero, mientras Sentencia les pisa los talones.