Gladiator (El Gladiador)

Ridley Scott dirigió en 1999 esta película "de romanos", recuperando un género que llevaba décadas abandonado y que había dado lugar a obras maestras como Espartaco o Ben-Hur.

Russell Crowe es Máximo, victorioso general romano convertido en esclavo y obligado a luchar como gladiador, tras haber caído en desgracia por su enfrentamiento con el nuevo césar Cómodo (Joaquin Phoenix). Destacan también las interpretaciones de Connie Nielsen (Lucila, hermana de Cómodo), Oliver Reed (fallecido antes de terminar el rodaje, en el papel de Próximo) y el también recientemente fallecido Richard Harris (Marco Aurelio).

Gladiator ganó 5 Oscars® en el año 2001, incluyendo mejor actor (Crowe) y mejor película; los otros tres premios son de carácter técnico, para mejor sonido, mejores efectos visuales y mejor vestuario.

Universal editó una magnífica edición de esta película en el año 2000, siendo este uno de los primeros DVD considerados "de referencia" para este formato. En su día fue de compra casi obligada para todos aquellos que adquirían su primer reproductor de DVD.

John Mathieson dirigió la fotografía de Gladiator en formato Super 35; la película combina filmaciones en interiores con bellas escenas rodadas en exteriores, como los supuestos bosques de Germania - filmados en Inglaterra - y los pasajes de Roma, rodados principalmente en Malta; otras de las secuencias exteriores se filmaron en Marruecos. Además, se realizaron muchos efectos digitales, con el fin de recrear para la gran pantalla el esplendor de la Roma Clásica, incluyendo el legendario Coliseo.

El DVD se presenta en un formato de imagen de 2.33:1, muy similar al original de cine (2.39:1); como es de esperar, incluye la mejora anamórfica para aprovechar al máximo la resolución disponible en el formato, especialmente con televisores panorámicos.

Como ya se ha comentado, en el momento de su lanzamiento este era un DVD prácticamente de referencia, en lo que a imagen se refiere. Cuatro años después, su imagen sigue mereciendo un notable alto, aunque ha sido superada por bastantes ediciones más recientes.

El máster utilizado para la transferencia a DVD tiene algunos (escasos) defectos de celuloide, en forma de pequeñas manchitas negras muy esporádicas. Aunque la definición puede considerarse como buena, no es extraordinaria; además, en algunas escenas oscuras y de poco contraste se nota algo de ruido de fondo en forma de grano. Finalmente, en este apartado reseñamos que hay alguna pequeña oscilación de la imagen en algunos cambios de secuencia.

En algunos momentos, la imagen nos da la impresión de que es algo demasiado oscura. Sin embargo, presenta un buen nivel de saturación del color (sobre todo en las escenas exteriores diurnas ambientadas en el Norte de África y en Roma). El contraste es excelente.

La codificación digital utiliza una tasa de bits (bitrate) media para la imagen de 4.6 Mbps. Aunque relativamente escasa, la compresión es lo bastante buena como para que no se noten defectos de compresión.

La película utiliza un disco DVD-9, con un buen cambio de capa, situado en un cambio de escena, sin sonido.

En resumen, el DVD recoge de forma muy correcta todas las virtudes de la imagen de esta película. Claro que conserva también todos los fallos que ya estaban presentes en sus pases cinematográficos. Pese a los cinco Óscars® recibidos, incluyendo el de los mejores efectos especiales, Gladiator incluye algunas legendarias pifias de imagen como el "copiloto de cuádriga con zapatos de seguridad" o la "cuádriga con bombona de aire comprimido".

El sonido en la versión original inglesa se presenta codificado en Dolby Digital 5.1 a 384 kbps. Esta fue durante mucho tiempo una película a citar cuando se hablaba de la espectacularidad sonora del por entonces joven formato del DVD.

Escenas como las de las primeras secuencias de la Batalla en Germania o algunos de los combates en el Coliseo (entre los minutos 1h 19' y 1h 25', o entre 1h 40' y 1h 44') siguen siendo válidas para cualquier antología del mejor sonido multi-canal.

Como puedes ver en este gráfico, la película abunda en momentos de gran espectacularidad sonora. Destacamos la utilización de los altavoces surround para la música (magnífica banda sonora de Hans Zimmer) y también para los numerosos efectos de sonido (entre los que destacan todos los ruidos de la lucha y el sonido del público en el Coliseo). En algunas escenas, tenemos la total sensación de estar entre el público asistiendo al sangriento espectáculo. Además, los altavoces traseros se utilizan para algunas voces de ambiente, e incluso (aunque en momentos muy puntuales, como en 1h 6' 15") para algún fragmento de diálogo.

Los altavoces frontales izquierdo y derecho tienen aún más relevancia, con abundante uso para la música y para los efectos de sonido (destacamos de nuevo el ruido del público del Coliseo). Es notable la gran direccionalidad que presentan muchos de estos efectos, lo que ayuda a apreciarlos aún más.

Las voces parten casi en exclusiva del canal central, que por cierto está grabado en algunos momentos a un volumen muy alto, que pone a prueba nuestro equipo de audio y sus altavoces. Sin embargo, en un equipo bien ajustado no se llega a producir distorsión sonora en ningún momento.

Por lo que respeta al canal de bajas frecuencias (subwoofer), su utilización es bastante moderada. Esto es una lástima, pues se hubiera podido aumentar aún más la espectacularidad de algunos de los pasajes sonoros.

Pese a que la edición española no incluye sonido DTS y el Dolby Digital está grabado a "sólo" 384 kbps, estamos ante una pista sonora muy completa, con muy buena fidelidad, combinando música de alta calidad con fragmentos donde la contundencia y direccionalidad de los efectos son notables.