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Después de Big Fish, Tim Burton se enfrentó al reto de volver a llevar al cine la novela Charlie y la Fábrica de Chocolate, de Roald Dahl. Pese a que ya existía una versión de 1971 con Gene Wilder como Willy Wonka, Burton ha sabido aplicar su particular estilo a esta revisión, que destaca tanto por su original e imaginativo diseño de producción como por algunos toques humorísticos muy peculiares. El papel del maestro chocolatero recae ahora en el actor fetiche de Burton; Johny Depp, sus padres y abuelo los interpretan Helena Bonham Carter, Noah Taylor y David Kelly. Destacan también las múltiples interpretaciones de Deep Roy como los clónicos y divertidos Oompa-Loompa, además del papel de Christopher Lee (Dr. Wonka). En Noviembre del 2005, Warner edita esta película -ideal para niños y también para adultos de todas las edades- en dos ediciones: La sencilla de un disco y la de coleccionista de dos discos, elegida para este análisis. |
IMAGEN |
El particular mundo de fantasía de Willy Wonka requirió un intenso uso de la tecnología digital para ser llevado a la gran pantalla. El director de fotografía Philippe Rousselot, filmó la película en Super 35 para luego ser procesada en posproducción con Digital Intermediate. El siguiente enlace proporciona más información sobre la fotografía de Charlie y la Fábrica de Chocolate. La calidad de la imagen no alcanza la perfección pero tampoco se observa ningún defecto reseñable. Si es cierto que el proceso digital resta esa particularidad "cinematográfica" de los títulos rodados y postproducidos de una manera más tradicional. El campo de visión presentado en el DVD amplia minimamente el formato original 1.85:1, llegando a una relacion de aspecto de 1.77:1 e incorpora mejora anamórfica. El nivel de definición es óptimo y como consecuencia la imagen se presenta nítida y detallada. Aunque quizá el único punto desfavorable sea que, en general, está demasiado oscura para nuestro gusto. La paleta cromática distingue radicalmente el mundo exterior; representado con colores apagados, poco contraste y poca iluminación; del interior de la fábrica, un universo de fantasía que, por contra, presenta una amplia gama de tonos y colorido. La transferencia de imagen utilizada para el DVD reproduce perfectamente estas particularidades de la fotografía. Un pequeño fallo es la presencia de algunos subtítulos en inglés quemados en el máster. Sólo son unos pocos, y además cuando aparecen hay subtitulado castellano automático, pero hubiera sido mucho mejor si se hubiera podido emplear únicamente el subtitulado por software. El cambio de capa está en una transición de escenas e interrumpe algo el tenue sonido de fondo, pero resulta poco molesto. |
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SONIDO (VERSIÓN ORIGINAL) |
El audio en inglés está a la altura de lo que se debe exigir a una superproducción actual. Sin tener la espectacularidad de otros títulos recientes (como el Episodio III de Star Wars, Batman Begins o incluso la europea El Hundimiento), el uso de los diferentes canales es bastante amplio, como se muestra en el gráfico de audio adjunto. El subwoofer actúa de manera notable y los traseros intervienen frecuentemente, sobre todo para la banda sonora, pero también en momentos donde los efectos crean una gran ambientación envolvente. Algunos de estos instantes más activos están en 9' 16'' (hundimiento del palacio de chocolate), 56' 59'' (caída por el túnel) o en 1h 18' 12'' (descenso súbito del ascensor). La discrecionalidad del audio es total, con un amplio posicionamiento de los efectos y gran parte de los diálogos, que no están anclados sólo en canal central y presentan una espacialidad poco común. La música y las canciones son de Danny Elfman; sobre todo en las canciones, es donde se transmite mejor el humor de la película, por lo que estas pequeñas piezas musicales de los Oompa-Lompa están entre lo más divertido de la película. Y además, hay algunas piezas musicales "recicladas", que incluyen hasta un fragmento de la famosa "Macarena". La fidelidad es también la que puede esperarse para una película así. Aunque irreprochable, la presencia de cinco canales, el subwoofer y un central trasero matriciado se hubiera beneficiado de una tasa de bits algo más alta o, puestos a soñar, de una pista en DTS. |
Datos técnicos |